Buenos Aires recupera el faro del Palacio Barolo

Un anticipo luminoso del bicentenario de la Argentina.

Bonnie Tucker / FST
A las 20 h del 3 de octubre, el recientemente reparado faro del Palacio Barolo, la primer y más excéntrica torre porteña, dará un anticipo luminoso de los festejos del Bicentenario argentino cuando un haz de luz iluminará brevemente el cielo de la ciudad.
Frente a la torre en Avenida de Mayo 1370, el pianista Horacio Lavandera interpretará tres sonatas de Beethoven evocativos del tema del edificio, cuyo planta ilustra el infierno, purgatorio y paraíso de la Divina Comedia de Dante Alighieri.
En 1919, el próspero empresario textil Luis Barolo encomendó la construcción del edificio de 100 metros de altura al arquitecto italiano Mario Palanti porque ambos eran admiradores de Dante. Desgraciadamente, Barolo no vivió para disfrutar la inauguración del edificio en 1923.
El faro de 300,000 bujías, cuya luz era visible hasta en Colonia, Uruguay, se usaba para anunciar asuntos de importancia popular, de los cuales el más famoso fue el resultado de la pelea Dempsey-Firpo, que tuvo lugar en Nueva York poco después de la inauguración. Los porteños sabían que una luz verde significaría la victoria del favorito argentino, y rojo la derrota. Esa noche comenzó con el júbilo ocasionado por un haz verde, pero terminó con amargura cuando el color inesperadamente mutó a rojo.
El faro fue reparado gracias a una campaña del Programa Puertas del Bicentenario del gobierno porteño, que logró contribuciones de los 240 copropietarios de las oficinas del edificio, la embajada de Italia, y empresas privadas.
De ahora en más, el faro del Barolo se prenderá durante una media hora el 25 de cada mes para conmemorar la revolución del 25 de mayo de 1810.
FOTO CRÉDITO: Los pisos superiores del Palacio Barolo, coronados por el faro. Bonnie Tucker.