Confort en el desierto

Domos geodésicos de lujo en un bosque patagónico.

Bonnie Tucker / FST
El aeropuerto de El Calafate está a dos horas de viaje, y posiblemente Usted tenga que bajarse del vehículo varias veces a abrir y cerrar tranqueras para llegar a su hogar de los próximos días, porque éste se encuentra en medio de un bosque de ñires de la estancia más alejada de este rincón ya de por sí solitario de la provincia argentina de Santa Cruz.
Cuando finalmente baja de la camioneta, es probable que su arribo haga levantar vuelo a una bandada de martinetas que iba caminando entre los arbustos. Sin duda se encontrará con muchas otras aves cuando desciende hasta la orilla del lago para mirar el glaciar Perito Moreno a lo lejos.

De vuelta en el campamento, verá que su cama en el domo geodésico montado sobre una plataforma de madera está correctamente tendida, con un acolchado, dos mantas pólar y sábanas blancas sobre un grueso colchón. Hay ocho domos en el bosque.

Durante la cena en el gran domo multipropósito que sirve como living comedor para todos los huéspedes, charlará con primermundistas amantes de la naturaleza mientras ustedes degustan vinos finos y selectos cortes de carne bovina u ovina acompañados de guarniciones de vegetales. Son gente que se entusiasma por los lugares vírgenes, pero también aprecia el confort.

Hay agua caliente para una ducha en la casa de baños de madera con sectores para damas y caballeros.

La mañana siguiente, al despertarse, observará a través de la ventana de PVC transparente de su domo, las ramas festoneadas de líquenes del bosque a su alrededor, y decidirá si quiere pasar el día caminando, avistando aves, haciendo ciclismo o escuchando las descripciones de la flora y fauna local que hace el guía. Más de un habitante de ciudad estresado pasa las primeras 24 horas durmiendo o leyendo un libro, con intervalos dedicados a comer. El desayuno se sirve en el domo grande, pero se lo pueden llevar a su domo.

Hasta ahora, la franja etaria de la gente que se alista para este tipo de experiencia ha oscilado, desde su inicio en 2007 (cuando yo visité el lugar), entre los 24 y 80 años. De ellos, el 90 por ciento son extranjeros de países como Inglaterra, Holanda y los Estados Unidos.
Adventure Domes, el eco-emprendimiento de dos amantes locales de la naturaleza, ofrece paquetes “todo incluido” de tres días (dos noches) que comprenden además traslados hacia y desde el glaciar en frente, y pueden prolongarse si el cliente así desea. Mínimo: dos personas. Costo: Aproximadamente US$250 por persona por noche. Informes y reservas: reservas@adventure-domes.com y 5199-0401 en Buenos Aires.

FOTO CRÉDITOS: Todas las imágenes cortesía de Adventure Domes.